8 de julio de 2011

Capítulo 52.

¿Cómo se empieza a olvidar?

- Pequeña…
- Ni pequeña ni leches.
Michael rió. Por alguna extraña razón le resultaba divertido que estuviera enfadada. Resoplé con tanta fuerza que hubiera jurado verme capaz de provocar un huracán.
- Tranquilízate.
- No, Michael, no me tranquilizo. He estado muy tranquila toda la mañana a pesar de las circunstancias. Pero ya no me tranquilizo más. Ya tenía pensado clavarle un tenedor y un cuchillo, pero creo que ahora iré a por un arma más grande.
- Cálmate, anda –suspiró mientras me abrazaba-. Así no vas a ninguna parte.
- ¿Y ella? ¿Ella dónde va, Mike? Toda la mañana sonriéndote, y tocándote los rizos y hablando con esa voz de… Aggg, ya sabemos que es perfecta, pero podía disimularlo un poco, ¿no?
- Un momento… ¿Estás celosa? –sonrió.
- ¿Te resulta gracioso que lo esté? Porque a mí no me hace nada de gracia ver como el diablo ese se presenta aquí el día de tu cumpleaños a ofrecerte…
- Su amistad –me cortó.
- Sí, claro. Si a mí también me encanta atacar a las novias de mis amigos, es una afición que tengo desde pequeña, deberías probarlo.
- Natalie no te está atacando, Judi. En ningún momento lo ha hecho –le miré incrédula. Antes temía pagarlo con él, pero ahora se lo estaba ganando él solito-. Y respondiendo a tu pregunta de antes… Sí, me resulta gracioso que estés celosa porque no tienes ningún motivo para estarlo –sostuvo mi cara y me besó. Pero esta vez no funcionó. Le aparté y me quedé frente a él.
- Lo peor de todo es que la defiendes.
- No la defiendo, Judi. Pero Natalie sólo trata de ser simpática.
- ¿¡Qué!? No si ahora resulta que la caigo bien, ¡pues menos mal! Porque el día que no lo haga me mata directamente.
- Estás exagerando demasiado…
- Michael, ha insinuado que estoy contigo solo porque eres un “pez gordo” –según reproduje sus palabras mi enfado se multiplicó por tres-. Y tú te has quedado callado. Lo que menos necesito ahora es que encima la defiendas –miré hacia otro lado intentando canalizar mi ira.
- Pues no vas a encontrar otra cosa.
Esas palabras fueron como un cubo de agua fría. Muy fría. Cayeron de pronto y me dejaron helada, sin posibilidad de reacción. Le miré de nuevo y sentí que me faltaban poco más de 10 segundos para romper a llorar.
- ¿Qué? –fue todo lo que pude decir.
- Conozco a Natalie desde hace mucho más tiempo de lo que te conozco a ti. Sé cómo es y las intenciones que tiene conmigo. Ha venido para pasar el día a mi lado después de mucho sin vernos y quiero que esté aquí. Y, sinceramente, la actitud que estás teniendo es más propia de una niña de 15 años que de ti. No sé qué te pasa, pero si vas a estar así, lo mejor es que te vayas.
Cincuenta cubos de agua fría. Y rompí a llorar.
- Pues entonces perdóname a mí por querer pasar yo también el día contigo. Ha quedado bastante claro quién es la que sobra aquí.
Me di la vuelta y comencé a caminar hacia la puerta. Pero a los pocos pasos allí estaba él de nuevo.
- Judi… No quiero que te vayas. Pero, por favor, trata de llevarte bien con ella –se acercó y atrapó mis lágrimas-. Es muy importante para mí.
- Eso es evidente.
- Tú no eres así… Tú confías en mí, siempre lo has hecho. ¿Se puede saber qué te pasa?
- ¿Qué me pasa? Que duele darse cuenta de que algo que creías que era perfecto no lo es. Y no lo digo por ti, lo digo por nosotros. ¿Qué pinto contigo? ¿Qué lugar ocupo en esa mesa, Michael? ¿Qué pinto viendo como tú y Natalie recordáis momentos juntos mientras vuestros padres charlan divertidos? ¿Puedes explicármelo?
- Eres mi novia.
- ¿Y cuántas veces has deseado que eso no fuera así?
- ¡Ninguna! ¿Cómo puedes decir eso?
- Cambio la pregunta. ¿Cuántas veces has deseado que yo perteneciera a tu mundo? Y contéstame sinceramente. Cámbiame por Natalie, imagíname con esos padres, con esa posición. ¿Cuántas veces has deseado que eso fuera así? No quiero mentiras –Michael me miró. Y permaneció callado. Sólo hay una cosa más clara que un “sí”. El silencio-. Vale, es todo lo que necesitaba oír. No soy suficiente para ti –me sequé las lágrimas y continué caminando hacia la puerta.
- No te vayas… ¿Qué voy a decirles a mis padres? –oí a lo lejos.
Me giré, sin dar crédito a lo que acababa de oír.
- ¿Es eso lo que te importa, el que les vas a decir? Estupendo Michael, de verdad. ¿Sabes qué? Que se acabó.
Se acercó corriendo y cogió mis manos.
- Judi, por favor… No digas eso ni en broma. Te quiero y lo sabes, y…
- Y nada. Nada, Michael. Soy insignificante a tu lado. Brillas más que todas las estrellas del cielo juntas y yo jamás seré así. No soy lo que esperas, ni lo que quieres.
- No, no, no. Eso no es así. Judi tú…
- Yo no pertenezco a tu mundo y es hora de ir aceptándolo –le corté de nuevo-, así que se acabó.  Volveré a la vida normal que tenía antes de conocerte.
- ¿Vida normal? ¿Ahora no tienes una vida normal?
- ¡No, Michael, no! No la tengo. ¿Y sabes otra cosa? Creo que empiezo a echar de menos un entorno que me quiera tal y como soy. Así que se acabó.
Comencé a caminar de nuevo con la certera convicción de que esta vez no me iba a detener.
Y no lo hizo.
Salí por la puerta y el enorme sol sí me hizo detenerme en seco. Y entonces me rompí. Caí al suelo y comencé a llorar desconsolada. Por primera vez en varios meses había entendido de verdad que no era posible que alguien como yo estuviera con alguien como Michael. Y eso dolía. Mucho. Y dolía porque yo le quería de verdad, porque por primera vez estaba a gusto con alguien y deseaba pasarme así todo lo que durara un “para siempre”. Porque no imaginaba mis días sin él y ahora tendría que empezar a comprobar lo duro que era.
Me arrastré como pude hasta las escaleras y me senté en ellas, apoyando la cabeza en las rodillas.
Y ahora, ¿qué? No quería volver a mi vida “normal”. ¿Cómo iba a querer eso? Quería a Michael, pero sólo había una cosa que tenía más clara que eso… Que no podía estar con él. Por su bien y por el mío. Él necesitaba más, siempre iba a querer más, él y su entorno. Todos hubieran deseado una Natalie, y yo no lo era. Yo era una chica normal, con los problemas y la vida normal de una chica española de 18 años cuyo mayor triunfo había sido lograr buenas notas durante toda su vida. Eso es lo que yo era. Y desde luego, quedaba muy lejos de lo que una estrella pudiera desear.
Así que se había acabado. Y tocaba pensar en otro tipo de futuro.
¿Por dónde tenía que empezar?
Es más, ¿cómo se empieza a olvidar?

9 comentarios:

  1. dios Judi!, aaaaaaaaaw me ha encantado ! no sabes lo buena escritora que eres !
    Natalie...como la odio. Y por un momento a Michael también. Defiende a esa ...esa..bueno, tu me entiendes xd Estoy totalmente de acuerdo con la reacción de Judi, Michael se lo merecía, aunque duela decirlo. Un escarmiento no le viene nada de mal. !Que valore lo que tiene!
    Espero que actualices muy pronto Judi ! muero por leer más !

    ResponderEliminar
  2. Con 2 palabras describo lo que pienso del capitulo: LO AME<3 enserio esta genial, pero podrías poner más capítulos por día? enserio te lo agradecería mucho.Saludos y Besos desde México(:

    ResponderEliminar
  3. Judiii! no sabes como se me puso mi cara de alegria al ver q habias actualizado! :D

    Odio a esa ...esa ash como era q se llamaba? bueno me da igual ¬¬ le deseo lo peor xq llegó a arruinar todo D:
    y Michael...q ocurre con el??!!! ¬¬
    no lo voy a defender, esto de acuerdo con Judi, como defiende a esa? ¬¬
    y ahora?, yo no quiero q terminen T__T ahh se vienen capitulos tristes :(. Espero q michael se de cuenta de lo pierde x su estupides ¬¬
    Espero q actualices pronto
    me dejas con una intriga grandota :S
    Saludos! :)

    ResponderEliminar
  4. QUÉEEE?! NONONONO! Osea, qué acaba de pasar?
    Judi y Michael acaban de romper? NOOO! D:

    Pero, ESA NATALIE ¬¬ y Michael también! defendiéndola.. AGGG!
    En serio yo no quiero que terminen, son tan bonitos juntos T__T

    Me encanta como escribes Judi, sin mucho "palabreo" sabes llegar a las personas!
    Simplemente.. genial!

    Un beso y please, continúala pronto!
    I love you (LL)

    Tati.

    ResponderEliminar
  5. A olvidar se empieza perdonando.Cuando de verdad amas a una persona,lo que quieres es verle feliz y no triste.
    Me ha encantado el capítulo.Me encanta tu manera de escribir.Te da la sensación de estar ahí,en la hitoria,junto a Michael.
    Pase lo que pase,no dejes de escribir.
    Y mucho ánimo

    ResponderEliminar
  6. Sería genial qe por eso Michael publicara la canción She's out of my life ;D

    ResponderEliminar
  7. Muchísimas gracias por actualizar!! Cuanto extrañaba tu nove. *-*

    Ya va, QUE HA PASADO? Han terminado? no, no, no, no, no!! Pero creo que a Michael le hará ver bien como son las cosas, y que al final se de cuenta que defendía a Natalie en vano. Como me cae mal esa natalie..

    Espero que sigas actualizando pronto!! *____*

    ResponderEliminar
  8. Casi mueroooooooooooooo!!! Que diablos le paso a Mike??? Ay me daban ganas de matarlo, pero igual lo amo jajaja, Judith tu nove esta genial!
    Corro a leer el 74 =)

    Anita

    ResponderEliminar
  9. Pero...u.u. Y que pasó con la confianza?

    Moonwalker-Jacksonera50

    ResponderEliminar